Un nuevo "Amanecer"

Un nuevo "Amanecer"
Foto: Cortesía Ballet Ecuatoriano de Cámara.

martes, 25 de mayo de 2010

La creación, la libertad y la alegría

EDITORIAL:
La Metro se Proyecta
Foto: Metrodanza

El gran propósito de promover la democratización del disfrute de la danza como lenguaje universal de co­municación, impulsado por el Ballet Ecuatoriano de Cámara, con el apoyo de organismos de desarrollo socio-cultural, a nivel nacional y local, se consolida en el 2004, en la conformación de la Escuela Metropolitana de Danza, como una unidad académica de formación profesional en las áreas de la danza donde la enseñanza es gratuita.

Para que la actividad danzaria cumpla su misión en el desa­rrollo sociocultural de nuestro país, debe, en su proceso de evolución continua, motivar a la niñez y a la juventud para que participen prácticamente en esta disciplina, al ocupar creativa y positivamente su tiempo libre. Asimismo, debe beneficiar la sólida formación de nuevos bailarines, profe­sores y creadores en las áreas de la danza clásica, danza contemporánea, danza nacional –mestiza y étnica-, danza latinoamericana y bailes populares y de salón.


Metrodanza funciona en la Casa de la Cultura Ecuatoriana y cuenta con 350 estudiantes de ambos sexos. La gran de­manda de niños y jóvenes por practicar el arte de la danza, posibilita la creación de una Escuela Satélite de Metrodanza, en el Coliseo de la Ciudadela 1º de mayo, zona Eloy Alfaro, sur de Quito. Esta nueva Escuela se encuentra funcionando, desde febrero del 2008, con 200 alumnos de ambos sexos.


Metrodanza y su Escuela Satélite, cuentan con el mejor claustro de profesores, quienes favorecen a mediano y largo plazo, el contar con profesionales altamente calificados en el campo de la danza, que participan en forma activa, me­diante la utilización de nuevas técnicas.


El mejor equipo pedagógico, de Metrodanza tiene una re­conocida trayectoria en el exterior como en el ámbito na­cional; de hecho muchos de ellos son miembros activos del Ballet Ecuatoriano de Cámara, lo que favorece su constante actualización y mejora en cuanto a técnica y participación pedagógica de la clase. Los profesores, no toman al ballet como un hobbie. Metrodanza pretende que la danza se con­vierta en un factor constitutivo de cada niño, niña y joven que ingresa a sus aulas, para de esta menra encontrar, de­sarrollar y disfrutar de nuestras habilidades artisticas como medio generador de nuevas sensibilidades.


La Escuela Metropolitana de Danza pretende crear personas sensibles con las nuevas dinámicas mundiales, que tengan una sensibilidad especial para lo humano y que crean que la vida es un goce. La democratización del arte permitirá que la danza se convierta en un factor inmensurable de identi­dad y de encuentro con nuestras propias valoraciones.


NOTI-ARTE

LA CAÍDA, UNA TRANSICIÓN DE VIDA
Por: Patricia Arcos
Estamos atraídos desde el centro de la Tierra… pegados al suelo.Nacer, crecer, reproducirse, morir… en esta condición gravitatoria.Caminar, correr, acostarse… siempre absorbidos por esta fuerza, 

que nos mantiene pegados al piso.
En esta situación de “gravedad” transitamos por la vida.”

La Caída es una coreografía creada por Sofía Barriga , éste baile conjuga emociones y sueños, representa la transición de la vida ligada a la tierra. Su estreno se dará el este viernes 21 en el Yaku museo del agua, a las 20h30. Dos funciones más el sábado 22 y domingo 23 a las 13h00.
Fuente: Tomada de la página http://balletdecamara.org.ec/


DON QUIJOTE, MÁS QUE UNA LEYENDA


La recordada e inmortalizada obra “Don Quijote” será interpretada por el Ballet Nacional de Ecuador. Esta historia conjuga magia, música y expresión, a la vez traslada a los espectadores a un mundo lleno de inmemorables recuerdos llenos de aventura, coraje y decisión.

Su presentación se llevará a cabo este viernes 21 de mayo a las 19:00 en el Coliseo María Augusta Urrutia de Solanda y el domingo 23 en el Coliseo Julio César Hidalgo del Centro Histórico de Quito a las 11:00.

Fuente: Tomada de la página http://www.balletdecamara.org.ec/

DON QUIJOTE SOBRE EL ESCENARIO

Por Karla Ayora

Cervantes nunca se hubiera imaginado hace cuatrocientos años, cuando publicó la primera parte de su novela El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha, que ésta iba a ser la inspiración para la creación de obras sinfónicas, adaptaciones teatrales, óperas, zarzuelas y ballets.

Múltiples escenas llenas de color y atractivos movimientos reviven a los personajes de la obra de Cervantes, las expresiones faciales y corporales de los bailarines hablaron por sí solas, pues demostraron las alegrías y derrotas de El Quijote.

Medidas perfectas sin descuidar la alimentación

Por: Karla Ayora y Vanessa Gómez


La danza es una medicina que, a través del ritmo y los movimientos, inyecta energía al cuerpo así como lo tonifica.


No solo una correcta postura y flexibilidad es lo que desarrollan los bailarines de ballet, también adquieren un alto nivel físico, para lo cual requieren rutinas diarias de aeróbicos o gimnasia. Basta con las arduas prácticas de baile y coreografías que repasan para deshacerse del exceso de calorías y mantener una esbelta figura.

Según explica Enriqueta Terán, bailarina profesional del Ballet Ecuatoriano de Cámara, practicar esta actividad por 30 minutos ayuda a quemar hasta 150 calorías, que equivale a media hamburguesa.

A más de este beneficio, también ayuda a tonificar el cuerpo pues los movimientos combinados con estiramientos permiten que el músculo se desarrolle de un modo distinto a cuando se practica otros deportes como la gimnasia. Los bailarines presumen sus músculos o piernas largas y delgadas, a diferencia del músculo con mayor volumen que muestran los gimnastas.

Aunque a simple vista parece que los beneficios son únicamente externos, sobre todo si solo se destaca el mantener una figura esbelta, también fortalecen el aparato respiratorio y óseo, ayuda a la regeneración celular y estimula la actividad cerebral, según un estudio realizado por la universidad McGill en Canadá.

Al analizar las ventajas que promete el ballet, también cabe recalcar que este ejercicio debe ser complementado con una buena alimentación. Incluso, la tonificación de los músculos se debe a un balance entre ejercicios y comida saludable. Sin que esto implique dietas exageradas que conlleven a la anorexia o bulimia.

Tengo hambre, pero debo comer sano

Ya se mencionó los beneficios que causa la práctica de la danza, pero existe una parte importante que los bailarines nunca deben descuidar, la alimentación. Sin duda, todos los que están inmersos en este fascinante mundo tienen que sacrificar mucho, como privarse del exceso de comida grasosa, carbohidratos, dulces entre otros.
Dentro de la escuela de danza la disciplina es muy estricta, por ejemplo, las chicas no pueden pesar más de 100 libras aproximadamente, y ese régimen se plasma dentro de las aulas.

Un grupo de bailarinas esbeltas ensaya una de las coreografías que se estrenará en dos semanas, mientras se sostienen de la barra, una de las alumnas, Nicole, se mira al espejo continuamente observando sus cuerpo, “mi contextura gruesa, en comparación con las otras chicas, a veces me siento pasada de peso”.

Nicole tiene una enorme vocación por la danza, sin embargo eso no impide que tenga antojos como cualquier persona, “cuando me vence la tentación de comer una pizza o unas papas fritas al siguiente día hago el doble de ejercicio para quemar más calorías” comenta, pero su anhelo es ser más delgada para tener más flexibilidad.

En el caso de los hombres los requerimientos físicos son distintos, a ellos les exigen tener el cuerpo musculoso para poder levantar a las bailarinas en las coreografías, sin embargo no pueden tener un índice de grasa corporal alto.

“nosotros debemos que tener la contextura delgada, pero nuestros músculos también tienen que estar bien tonificados, para esto hacemos una rutina de ejercicios y comemos sanamente” dice Emilio Cuello, alumno del Ballet de Cámara.

Estos son algunos requisitos que deben cumplir los bailarines que pertenecen al Ballet, que como cualquier otra disciplina exige mucho sacrificio, tiempo y esfuerzo, pero esto no quiere decir que tienen que privarse de todo, sino se trata de comer normalmente pero con medida.

NOTI-ARTE

LAS PLAZAS DE QUITO SE LLENAN DE DANZA




Por Karla Ayora

Bailes, vestidos de colores y sonrisas es lo que se verá el próximo 29 de abril en las plazas del casco colonial de la ciudad, en honor a la celebración del Día de la Danza con el auspicio de la municipalidad de Quito.

Desde la mañana, el público podrá disfrutar de comedias musicales y shows de danza contemporánea en la Plaza de la Independencia. A las 11:00, Alex Cevallos interpretará una comedia denominada “Cosas que pasan” y, a las 11:45 se presentará el grupo Danza Ensamble y la Compañía Nacional de Danza.

Con la finalidad de evitar el trabajo y explotación infantil, la Casa de la Niñez presentará en la Plaza de Santo Domingo comparsas, malabares, juegos y estarán también los grupos: Danza Emaus, los Buenos de Palermo, Títere Fue y la música de los Cuatro del Altiplano.

El Ballet Ecuatoriano de Cámara, uno de los organizadores, invita al público quiteño a reunirse este jueves 29 de abril como un día de integración familiar.

CUENCA VIVE SUS FESTIVIDADES JUNTO AL BALLET



Cuenca celebró sus fiestas de fundación el pasado 12 de Abril, y por su aniversario, el Ballet Nacional organizó el festival de danza contemporánea “In Vitro Cuenca 2010” para que el público disfrute de las funciones de danza en sus diferentes manifestaciones.

El festival “In Vitro” cuenta con el auspicio del Fondo Iberoamericano de Apoyo a las Artes Escénicas (IBERESCENAS) y se desarrolló en un programa cultural de cuatro días, en los que se pudo disfrutar de shows artísticos en los espacios públicos; mientras que las charlas, clases abiertas y funciones nocturnas se presentaron en el Auditorio del Banco Central.

Grupos de México, Chile, Brasil, Argentina y Ecuador también estuvieron en el evento. El país fue representado por los grupos: Compañía Nacional de Danza, Ballet Ecuatoriano de Cámara y el Grupo UDANZA de la Universidad del Azuay; cada uno dejó encantado a los espectadores con sus intervenciones pues son obras que se realizan pocas veces en el año.

Oscar Santana y Lorena Delgado, directores y creadores, comentan que el propósito del festival fue también reunir grupos y compañías de danza ecuatorianos y extranjeros, y abrir espacios a los nuevos artistas.

Ballet Nacional da “Fuerza a Chile”



Por Karla Ayora

Tras el lamentable terremoto ocurrido en Chile el pasado 27 de febrero, el Ballet Nacional organizó dos obras de danza con maestros bailarines chilenos a favor de todas las familias damnificadas.

El escenario para la presentación de estas obras fue el Teatro Bolívar. La danza denominada “vuelvo” fue recreada por el elenco del Ballet Metropolitano y junto con las melodías de la Nueva Canción Chilena, la colorida danza se interpretó para 800 personas aproximadamente.

“Blancanieves y los siete enanitos” fue la segunda obra dirigida por los maestros chilenos Jaime Jory y Georgina Araneda, el movimiento del colorido vestuario de los bailarines dejó encantado a los espectadores, igual que la obra “vuelvo”.

Esta fantástica historia de los Hermanos Grimm llevada al sexto arte incentivó a reunir a las familias a disfrutar del acto y recaudar fondos con donaciones voluntarias del público, pues las obras que realiza el Ballet Nacional son gratuitas.

El evento fue avalado por el Ministerio de Educación , de Cultura, Municipio de Quito, Gobierno Provincial de Pichincha y la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Las donaciones fueron recolectas en ánforas para después enviarlas a la embajada chilena.

El retorno de la esperanza



Por Karla Ayora

El vibrante sonido del charango y la quena de caña latinoamericana se escuchó en todo el escenario y un destello de luz iluminó un rincón del teatro para manifestar la salida de los bailarines, quienes formaban una hilera blanca y roja para representar a todas las vidas que se apagaron después del exilio chileno.

Con movimientos sincronizados, los 20 bailarines se integraron en parejas y como las montañas andinas formaron pirámides que rotaban de un lado a otro, mientras que los espectadores miraban anonadados los movimientos apasionantes de los danzantes.

“La guitarra tiene sentido y razón”, “ni toda la entierra entera” son algunas frases de las canciones de “Vuelvo”, una obra que ha danzado durante tres años por Latinoamérica y es dirigida por los maestros chilenos Jaime Jory y Georgina Araneda.

Es una obra que representa a los pueblos indígenas chilenos, dice Camilo Coello mientras se coloca una cinta alrededor de la frente con bordados de figuras andinas; él se siente identificado con la obra porque le gusta el ballet folklórico, y además lleva una vida espiritual que le permite transformarse fácilmente en los personajes de la danza.

Cuando salta al escenario, Camilo da pasos alargados y se mezcla entre los vestidos de colores de las bailarinas, cada movimiento es perfectamente interpretado, tanto, que hasta la mirada de todas las danzantes se conjuga con la música y transmite al público la tristeza de las mujeres que se quedaron viudas después del exilio.

María José Flores, baletista y maestra de danza, interpreta varios personajes en los distintos cuadros de la obra, pero el que más le apasiona es “El cuarteto” porque le recuerda a la nostalgia que tiene por su tierra, Guayaquil, al igual que las mujeres chilenas por su país.

Pero no todas fueron escenas de melancolía. El danzante, Luis Cornejo, representa el cuadro del homenaje al cantante Víctor Jara, para él es un privilegio interpretar a los artistas que asumieron el compromiso por el cambio y la transformación de la sociedad.

La fuerza del final de la obra estuvo presente en los elementos; la ropa de seda de los bailarines brillaba junto a los faros de luces del escenario y con pasos estratégicos lograron formar la estrella de la bandera chilena, acto que cerró la danza junto a los alaridos del público.


Los estigmas marcados en la danza



Por Karla Ayora

¿Puedes escucharme? Decía la canción de fondo de la obra de danza “Estigmatizado” o “derecho a ser diferentes”. Con pasos lentos, la bailarina Salomé Cisneros danza sincronizadamente con la música hasta que, un corte abrupto de la melodía anuncia la aparición los demás personajes que representan a la maldad, discriminación y la muerte.

Salomé acostada en piso restriega su rostro, angustiada mira a su alrededor y en seguida recibe un simulado golpe de de Paúl Rey “la discriminación”, el estruendo de la música acompaña al llanto de la bailarina, poco a poco se recupera y con una mirada de rabia pedía compresión a todos aquellos que la acosaban.

Cada personaje representa un mundo distinto: rockeros, hopperos, punks, entre otras tribus urbanas que se han desarrollado en la sociedad y que, según Kléver Viera, tienen eco en las ciudades andinas.

Viera ó “el maestro”, como lo llaman sus seguidores disfruta de la obra desde un rincón del Arco de la Circasiana, en el parque El Ejido, con gestos y uno que otro grito dirige la obra para que todo salga a la perfección y que se reflejen los cuatro meses de ensayo de los bailarines.

La inspiración de la obra nace a partir de éstos grupos de jóvenes que se encarnan en los barrios marginales y en el sur de la ciudad, en donde también existe una fuerte presencia de adolecentes indígenas y migrantes del campo que se fusionan con las tribus urbanas y “con la danza le damos voz a los chicos que representan a la diversidad étnica del país”.

En esta profesión los balletistas se presentan frente al público después de terminar los ocho años de carrera, pero Nicole Reinoso es la excepción, igual que Salomé. Ellas llevan estudiando cuatro años en el Ballet de Cámara y ahora, el maestro les ha dado la oportunidad de debutar en esta obra.

Nicole representa a una drogadicta soñadora, junto con su danza, los colores de sus mayas y el tutú se difuminan con la velocidad de sus movimientos y la diferencian del resto personajes pues ella representa la esperanza en el sueño de Paúl.

“Me siento identificada con Estigmatizado”, dice Nicole, “además el ballet es mi pasión, tanto, que empecé a estudiar a distancia el colegio para dedicarme 100% a esta profesión. Kléver es uno de mis maestros y descubrió un potencial en mí, y creo que por eso me escogió para interpretar la obra”.

Como estigmas, los ojos de los bailarines están marcados con unas gruesas líneas negras de maquillaje y los trajes de colores oscuros marcan la silueta de los danzantes que se mueven de un lado a otro acompañados por una música de ultratumba, finalmente forman una fila se toman de las manos y dan la venia al público.

Posturas y movimientos que imponen elegancia

Por: Vanessa Gómez

Cuello largo, piernas largas, posición erguida.
Foto: cortesía del BEC

Si crees que el ballet es una disciplina muy estricta que requiere varias horas de repaso y duras rutinas de entrenamiento físico, no estás muy lejos de la realidad. La danza es un arte que exige mucha preparación, pero los resultados son lo más gratificante para los bailarines, sobre todo cuando llega la hora de poner en escena el fruto de su arduo trabajo.

Cada vez que asistes a una presentación, ya sea de ballet clásico o contemporáneo, habrás notado que las bailarinas y bailarines poseen una figura espléndida y proyectan elegancia con cada uno de sus movimientos. Estas características no se logran en cuestión de meses, es algo que se obtiene tras años de agotadores ensayos frente al espejo, esperando alcanzar la postura perfecta. Generalmente, la edad apropiada para iniciarse en esta profesión es a los 8 ó 9 años.

Cuando los alumnos ingresan a los talleres de danza, se les realiza exámenes físicos para determinar su elasticidad, flexibilidad y ritmo. Sin embargo, estos aspectos van evolucionando y perfeccionándose durante la preparación en las clases.

En cuanto a la figura, el ejercicio del ballet va moldeando un cuerpo erguido y delgado. Si consideras que tu cuerpo no concuerda con estas exigencias, no debes desanimarte pues muchos bailarines han ido moldeando su figura estética durante la etapa de desarrollo (adolescencia).

Habrás escuchado, en repetidas ocasiones, que uno nunca termina de aprender. Si bien es cierto los médicos, arquitectos y demás profesionales se actualizan constantemente para cumplir con la demanda de sus clientes; con los bailarines profesionales sucede lo mismo.

Cada día deben repasar sus rutinas y experimentar con la creatividad, también, muchos optan por complementar las clases de baile con pilates (entrenamiento físico que prioriza el uso de la mente para controlar el cuerpo) u otros ejercicios que ayuden a desarrollar su nivel corporal y artístico.

Como se mencionó al inicio, el ballet es una carrera que requiere una exhausta preparación física, pero los beneficios son más. Entre ellos se puede mencionar que mejora la motricidad, brinda una buena salud, mantiene el físico, combate el estrés, y; uno de los más importantes, brinda un mayor nivel de cultura para apreciar el verdadero arte.


¿El ballet es sólo para mujeres?


El cubano Eddy Borges López (34 años) trabaja como bailarín profesional del Ballet Ecuatoriano de Cámara. También es Coordinador Académico de la Metrodanza.


Algunos hombres creen que ser bailarín profesional implica ser afeminado, por tanto, acreditan el arte de la danza únicamente a las mujeres.



Eddy Borges, bailarín profesional, afrontó una situación similar cuando era un niño.

A los nueve años no puedo estudiar danza por los comentarios de su padre, de todos modos, participó en algunas presentaciones de danza folclórica y moderna en su natal Cuba.

Con el apoyo incondicional de su madre empezó a estudiar ballet a los 17, su pasión y dedicación por el baile lo convirtió en un profesional a sus 21 años.

Para Eddy, es una lástima que en los grupos de niños apenas hay tres ó cuatro alumnos varones, lo cual implica que esta mentalidad no ha cambiado aún. Pero en el caso de jóvenes entre los 16 y 18 años, hay alrededor de 15 estudiantes, lo que podría significar un escenario más amplio para los hombres que se sienten atraídos por este arte y no se cohíban ante el qué dirán de la sociedad.

Tanto hombres como mujeres poseen talento para esta profesión, la dedicación y esfuerzo que entregan es equitativo. Basta con apreciar las obras que desarrollan y los personajes que encarnan para comprender que el ballet es un lenguaje corporal que expresa pasión y sacrifico por parte de ambos géneros.

Una profesión sacrificada pero gratificante

Por: Vanessa Gómez

Albert Romero personifica el pintoresco personaje de Camacho en la obra El Quijote.
Albert Romero es chileno y llegó al Ecuador en 1997. Estudió ballet clásico en el Teatro Municipal de Ballet de Santiago de Chile y actualmente es bailarín profesional del Ballet Ecuatoriano de Cámara.


¿A qué edad decidiste estudiar ballet a nivel profesional?

Lo decidí al cumplir 17 años, aunque me gustaba bailar desde muy pequeño. En Chile existía el gran tabú que los hombres no debían bailar, pues se prestaba para muchas interpretaciones. Fue por eso que al cumplir la mayoría de edad me arriesgué a dedicarme profesionalmente a la danza, desafiando los tabús que yo mismo tenía.

Respecto a tu familia, ¿recibiste el apoyo que esperabas al tomar tu decisión?

Claro que sí, mis papás jamás cuestionaron mi fascinación por este arte. Ellos reconocen que la danza es una profesión muy sacrificada y que implica un alto nivel de cultura el saber apreciarla. Además, mi hermano mayor también es bailarín profesional, él tiene su propia academia de ballet clásico en Uruguay.

Llevas cerca de 13 años viviendo en el Ecuador, ¿cuándo decidiste establecer tu vida en este país?

Cuando conocí a mi esposa. Al poco tiempo de conocerla supe que era el mejor lugar para enraizar mi vida tanto personal como profesional. Y no me equivoqué. Tenemos dos hijos por quienes debemos salir adelante, y apoyarnos mutuamente es lo que ha fortalecido nuestra relación.

¿Cómo has logrado organizar tu tiempo entre el trabajo y tu familia?

Ha sido muy complicado, los repasos en el BEC son a diario y constantemente estamos en giras promocionando nuestras obras. Reconozco que mi esposa muchas veces ha tenido que desempañar el rol de madre y padre a la vez. Pero siempre encontramos el modo de organizarnos; por ejemplo, a veces mis hijos vienen a mis presentaciones y hasta me dan sugerencias para mis personajes.

Tus hijos, ¿ha mostrado interés por seguir tus pasos?

Sí, sobre todo el mayor. Si en un futuro me dicen que desean ser bailarines, tendrán todo mi apoyo, siempre y cuando tomen en serio la profesión y se dediquen cien por ciento a esta disciplina.

Camacho es el personaje más reciente que estás interpretando, ¿cuánto tiempo te tomó la preparación para este papel?

La preparación ha tomado como 8 ó 10 meses, ha sido uno de mis personajes más difíciles de interpretar ya que no requiere de tanto baile sino que debo enfatizar lo expresivo. Mi personaje le brinda el tinte humorístico a la obra, así que debo exaltar mis gestos.

Pese a los grandes sacrificios que has realizado por tu carrera, sobre todo en cuanto tu familia, ¿qué es lo más gratificante que te ha brindado tu profesión?

El poder recorrer todo el país por las giras que realizamos. He podido llegar a cada rincón del país, así como también viajar a Colombia, Uruguay, Bolivia y otros países donde he conocido gente y les he presentado espectáculos de calidad.

Danza y anorexia de la mano


La obsesión por estar delgada en el ballet está presente
Foto tomada de: www.contusalud.com

Por: Patricia Arcos


La bulimia, anorexia, el síndrome de comida compulsiva y el exceso de ejercicio están ligados a factores emocionales y a problemas de alimentación inadecuados. En la actualidad, la cultura otorga importancia a la apariencia, pero sobretodo a la delgadez. Cualquier danzante con baja autoestima y dificultades para controlar sus emociones puede desarrollar un trastorno alimentario, que luego se convierte en un problema de salud físico y mental.


El Doctor Jorge Naranjo define a la anorexia como un equivalente a morir de hambre, debido a que, quienes la padecen no comen lo adecuado ni las porciones correctas. Para éstas personas el miedo por subir de peso es incontrolable. Por otro lado define a la bulimia con características como atracones de comida, y en seguida vómitos o ingesta de laxantes o diuréticos.


Las enfermedades se ven ligadas a un descenso de peso extremo. Evitar las comidas es uno de los primeros pasos para vincularse a este problema. Realizar un tiempo excesivo de ejercicios es otra de las complicaciones de esta enfermedad. Los danzantes se esfuerzan por quemar las calorías de los alimentos ingeridos. Otro de los factores asociados es el síndrome de comida compulsiva que se basa en ingerir todo tipo de alimentos y en grandes cantidades. Por lo general los bailarines que tienen esta complicación lo hacen en lugares alejados de personas o de familiares.


Las secuelas de esa actividad se ven reflejadas en la sensación de soledad y de culpabilidad que sienten al terminar de comer los bailarines.





lunes, 24 de mayo de 2010

La perfección de Blanca Nieves

Interpretación de los personajes de Blanca Nieves y los siete enanitos.

Foto: Cortesía Ballet Ecuatoriano de Cámara


Todo el elenco de la obra en el cuadro final.

Foto: Cortesía Ballet Ecuatoriano de Cámara


Por: Patricia Arcos

El sereno cántico de los pájaros, la melodiosa voz de un árbol representando al narrador del cuento. Estos fueron los primeros sonidos que se escucharon dentro del Teatro Bolívar. Las luces iluminaron el escenario y dieron la pauta para el inicio de esta obra recordada no solo por niños.

Con impecables movimientos, Blanca Nieves entra en escena. Su sincronización, elegancia y habilidad muestra la preparación de su personaje. Tamara Mudaira representa a la dulce Blanca Nieves, una niña ingenua y soñadora atraída por la naturaleza y por un mundo desconocido.

La lucha constante entre el bien y el mal se ven reflejadas en la obra. La malvada bruja busca la perfección de una belleza aclamada por un espejo mágico, sin embargo, descubre que una niña ocupa ese lugar dentro del reino, como la mujer más hermosa. Desde entonces comienza a despertar una envidia incontrolable y la malicia se expresa en cada gesto y movimiento de la bruja.

La obra conjuga sentimientos de alegría, temor y tristeza. La búsqueda de un mejor lugar para vivir lleva a Blanca Nieves a adentrarse en un pequeño mundo lleno de magia y nuevas experiencias. Su encuentro con siete enanitos, cada uno con diferentes personalidades, le lleva a compartir traviesas vivencias que hacen de éste cuento un momento eterno de felicidad.

Amistad, confianza y dulzura son las enseñanzas que esta historia les deja a cientos de niños que acuden ansiosamente a verla.

La música y la vestimenta dan un toque glamoroso a esta fábula. Los trajes coloridos y entallados de cada bailarín revelan en cada movimiento la perfección de este arte.

Trilogía de la Madre Tierra


Por: Patricia Arcos
Alas de Tierra

Como un libro, planea por el aire
aquella avecilla… Como un decreto,
un estatuto del viento, abre sus alas y
cruza fronteras de nuestra América
morena, es llevando el mensaje de
nuestros primeros ancestros
Música : Borde mar, Inti Illimani y Julio Andrés Pérez


Semillas de Tierra
La semilla nace de la tierra, nace del vientre, tiene principio y tiene fin. Permanece sagrada como la madre en el mundo, toca a cada ser como a su hijo amado. Cada mañana se la ve crecer conciente y perfecta de que forma parte de su entorno



Lazos de Tierra

Lazos de tierra es una caricia a la América del Sur, a la Pachamama. Es un homenaje a la raza y a los seres ancestrales que dejaron una herencia valiosa de cultura.

Es el final de una trilogía y de un homenaje a la América morena, a sus hombres y mujeres que desde su cultura milenaria han dejado una filosofía de vida ligada a la tierra.




Galería de Fotos

Presentación Don Qujote de la Mancha.
Fotos: María José Larrea.




Presentación Lolita Tacuri.
Fotos: María José Larrea.



Día de la Danza.
Fotos: Cortesía del Ballet Ecuatoriano de Cámara.

“Si quieres ver danza mira a Edisel Cruz”


Un artista inquieto, con muchas ideas en su cabeza, rebelde, como cualquier gran creador.

Foto: Cortesía del Ballet Ecuatoriano de Cámara.

Por: María José Larrea.

Se trata de un hombre que moviliza una energía formidable. Quien lo conoce, puede reconocer que se trata de una persona a la que basta solo con mirarlo para saber que quiere gritar al mundo que se siente vivo. Que aprovecha cada minuto del día para desbordar su pasión por bailar y su anhelo por crear. “Si quieres ver danza mira a Edisel” es lo que afirman muchas de las personas que lo conocen. A sus 29 años, es considerado un coreógrafo nato, que puede interpretar cualquier tipo de papel sea este, clásico, contemporáneo o folclórico. Son 13 años de trayectoria los que relatan su vida inmersa, desde siempre, en un mundo mágico, lleno de técnicas, estilos y movimientos corporales que demuestran que la danza es un arte que se lo lleva grabado en el alma.

Elisel Cruz, nació en Cuba en una cuna de artistas. Su madre artesana y su padre actor de cine, ambos con una creatividad impresionante que sin duda, fue heredada por Elisel. El desenvolvimiento de su padre en el cine le permitieron a este joven involucrarse, desde muy pequeño, con apenas 7 años, en un entorno repleto de talentos a los que miraba pero no admiraba, y mucho menos entendía. En ese entonces su tierno sentido lo único que quería era perseguir a su padre, sin saber que con el tiempo viviría en un mundo muy similar. (“yo no sabía, no entendía lo que hacían, solo quería estar cerca de mi papá, dice).

Siempre se inclinó por actividades que le permitían expresarse. Inició con artes marciales, porque sentía esa necesidad física de canalizar su energía. Sin embargo, Edisel sabía que esa no era aún la manera de reflejarse. ¿Por qué tengo que pelearme con alguien para satisfacer algo físico? Fue la pregunta que tuvo que responderse para decidirse por otra práctica. Las opciones eran muchas, pues siempre le gustó dibujar, el cine, la música, la pintura y el diseño, pero la respuesta la encontró en un personaje muy cercano, su hermano, su ejemplo, pues había iniciado su carrera como bailarín hace ocho años. En él vio reflejada la expresividad que tanto buscaba y en la que tanto se identificaba.

Edisel cree que la vida le ha dado suficientes oportunidades –buenas y malas- para ser quien es. La primera - quizá la más importante- fue cuando se enfrentó a la danza por primera vez. En uno de los espectáculos de danza contemporánea a los que asistió, pudo apreciar su futuro en escena. Desde ese momento confirmó “eso es para mí, aquello que estoy mirando es lo que he estado buscando”, recuerda el bailarín.

A los 16 años, “una edad en la que había que cortar camino” como él menciona, pues se trataba de una carrera que implicaba mucha anatomía, formación, reglas, formas a las que debía acoplarse reconociendo que en el camino se encontraría con bailarines que iniciaron a tempranas edades, 9 años o incluso menos, y eso convertía al ballet en un reto mucho más fuerte y disciplinado. En ese momento, Edisel solo pensó en ser como ellos. Sin importarle nada más que desarrollar su arte, como un pájaro de alto vuelo, viajó a la Habana a estudiar ballet clásico. Recibió el apoyo de un padrino argentino por quien siempre mantuvo firme su convicción de “hacer lo que tenía que hacer”. Las oportunidades siguieron llegando y al cabo de 4 años, su espíritu competitivo se vio reflejado: Edisel llegó a ser un bailarín profesional.

Desde entonces, es un artista inquieto, con muchas ideas en su cabeza, rebelde, como cualquier gran creador. Su espíritu siempre dispuesto a investigar, expuesto al caos, a hacerse problema, a soñar, incluso con cosas que sabe que son irrealizables, pero que no dejan de ser un sueño.

Hace nueve años que llegó al Ecuador, y sus apetitos no han cambiado. La danza sigue siendo su mundo interno en el que no cuentan mucho las reglas, sino que sobresale un sentimiento corporal, en el que siempre está presente el amor y los conflictos, pues cuenta que su vida se ha desarrollado así, de manera “ambivalente”, lo cual resulta una característica muy significativa en sus obras y creaciones.

Su equilibrio radica en la danza, y es que ver su danza es como conocer su personalidad alegre, su contrariedad, su fuerza, su nivel técnico, su dinamismo, su versatilidad, su vida. Edisel refleja su talento y su profesionalidad con pasos de ballet. Es una tromba de aliento, una ola fuerte que envuelve, que sabe lo que quiere decir. “Mi cuerpo todavía anhela bailar, pero mi mente anhela crear, es como una dicotomía, algo complicado, me siento entre dos mundos, no hay un punto común, porque mi cuerpo ansía bailar y mi mente esta todo el tiempo creando”, afirma.

Siempre quiso crear, el diseño, animación y edición de tv, la música, la pintura, siempre le gustaron. Pero su equilibrio radica en reconocer su locura por la danza, por los placeres y sus extremos. “Me inclino tanto a la derecha, que llego a la izquierda. Puedo ser muy serio al punto de ser paranoico, agresivo o al contrario puedo ser súper relajado, chistoso, un payaso”.

Por ahora, sus ideales personales y profesionales son muchos. En lo personal, su novia y su hija seguirán siendo su motor; en lo profesional planea seguir bailando, creando obras espectaculares que sencibilicen al público "lo que la vida le ha dado". Esa es su aspiración más próxima, dice.